Una vez texturizada la pasta y escurrida del suero, procedemos a prensar manualmente anudando la gasa quesera. Mantendremos el queso anudado en la gasa unas 24 horas, pasado este tiempo retiramos la gasa y empezamos a madurar el queso, o si se trata de un queso fresco, ya nos lo podemos comer.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
0 comentarios:
Publicar un comentario